Una razón para volver a confiar en la política, que tan masacrada había quedado después de la crisis del 2001. Uno empieza a ver ese logotipo de Argentina corte escarapela, y empieza a ver los stickers que dicen "Aquí también la Nación crece", y empieza a ver las consignas escritas en las paredes que dicen "Néstor no murió" o "Fuerza Cristina", consignas que le causan una sensación de orgullo, que le hacen inflar el pecho y pensar "qué bien que estamos volviendo a los buenos años, a los gloriosos años del peronismo, volvemos a recuperar la igualdad, el fifty-fifty. Como clase media podemos comprarnos electrodomésticos, notebooks, netbooks, macbooks, blackberrys, autos, motos, heladeras, microondas;
nuestros salarios suben seguido al igual que la inflación, que existe pero no nos complica la vida. Las clases bajas tienen los planes sociales; la ANSES las ayuda con la asignación universal, tan bien conseguida por Cristina. Todos los días se abren nuevas escuelas, se construyen nuevos puentes, centrales nucleares, represas, escuelas, se urbanizan las villas, se protege a los trabajadores. Y las clases altas están mejor que nunca.
Los empresarios andan contentos por ahí aplaudiendo los discursos de Nuestra Presidenta. Los gorilas no saben qué hacer, porque cada vez que miran las encuestas, éstas les demuestran que están equivocados, que el pueblo no tiene un pelo de gil; que por más que los diarios publiquen noticias alarmantes, que la inflación asfixia y restringe la capacidad de consumo de la clase media, y las clases en estado de emergencia, y sobrepasa la canasta básica;
que las relaciones con Estados Unidos están tan mal y Obama no viene a visitarnos ni la saluda a Cristina, y que el índice de corrupción es uno de los más altos del mundo porque están De Vido, que Moreno es un patotero, que la inseguridad no nos deja vivir en paz ¿quedó claro?, que Moyano hace lo que quiere y tiene tremendo poder, o las críticas de izquierda, la burocracia sindical, que no deja nada para los gremios no alineados, que las instituciones están en su peor momento, que hay que recuperar los trenes, que hay que controlar el petróleo y poner más restricciones a la minería, que el gobierno pacta con los empresarios y los políticos del menemismo.
Nada de eso importa, son manotazos de ahogado. Estamos primeros en materia de derechos humanos, castigando a todos los milicos que hicieron desaparecer a los militantes que luchaban por un país mejor, siguiendo el Plan Cóndor. Y la economía marcha, las inversiones llegan, a pesar de los informes de las consultoras privadas, que trabajan con intereses internacionales. Nos reímos del FMI, que tanto mal nos hizo y le mostramos el ojete.
Vamos Cristina. Néstor se murió para que todos nosotros nos salvemos. No le importó su propia salud, sólo pelear por el pueblo. Un hombre con una perspectiva increíble, que miraba al continente presidiendo la Unasur, y al mismo tiempo al conurbano bonaerense presidiendo el PJ. Este modelo necesita apoyo, y más apoyo. ¡Y el bicentenario! Qué espectáculo. Qué demostración de grandeza. Así dan ganas de ser argentinos.
Al comentar esto a alguien es común que la respuesta sea: "Sí, vi; por ejemplo yo". Porque al fin y al cabo están haciendo las cosas bien. Después del conflicto contra el campo, o mejor dicho contra los oligarcas que protestaban porque querían todavía más, y después de la Ley de Medios Audiovisuales, te das cuenta de que las propuestas van a favor del pueblo y contra los grandes monopolios como Clarín que crecieron gracias a transas, o la fábrica Ledesma, o el grupo Rocca, todos empresarios a los que el gobierno no les dio la mínima cabida. Porque este gobierno, nacional y popular, está con el pueblo. Como Perón.
Porque este gobierno no carga con un muerto encima. ¿presos políticos? Dejame de joder; son troskos idealistas, que piensan que rompiendo las cosas, rompiendo las vidriedras de los bancos van a lograr algo más que crear disturbios en la vía pública. ¿Gatillo fácil? Y bueh, la policía es la policía. Por algo está la Garré ocupándose de la corrupción de la Federal. La bonaerense es cuaestión de la provincia. Que de esos se encargue Scioli, que para eso está. ¿Luciano Arruga? No lo conozco. ¿Julio López? ¿Qué le vamos a hacer? Los milicos todavía tienen poder. Tampoco vamos a hacer desaparecer a las fuerzas armadas. ¿Los bolivianos muertos del Indoamericano? Eso es culpa de Macri y de las patotas de Duhalde. Si nosotros esperamos su plan de vivienda
con la financiación en mano y nunca lo presentó.
Así van las cosas en la Argentina hoy en día. El kirchnerismo suma nuevos adeptos mientras que la oposición trata, sin éxito alguno, ser algo.